Colección: Juguete sexual anal

Los juguetes sexuales anales abren las puertas a una exploración íntima y profunda de la sexualidad. Diseñados para estimular la zona anal, ofrecen diversidad de sensaciones tanto para los principiantes como para los más experimentados. Con una base plana, más ancha que el propio juguete, estos accesorios garantizan una inserción segura y cómoda, evitando así cualquier absorción a través del recto durante su uso.

• Tapón anal:Perfecto tanto para principiantes como para usuarios experimentados, este juguete sexual de forma oblonga garantiza una penetración gradual gracias a su cuello y frenillo apretados, ofreciendo así una experiencia anal suave y progresiva.
• Rosario anal:También llamado "cuentas tailandesas", este juguete está formado por una serie de bolas unidas entre sí. Insertadas gradualmente, estas perlas amplifican las sensaciones y proporcionan orgasmos progresivos e intensos.
• Consolador anal:En forma fálica y provisto de una base plana a menudo equipada con una ventosa, el consolador anal permite la estimulación desde la entrada anal hasta el primer tercio del recto. Ideal para los amantes del ida y vuelta y de las sensaciones profundas.
• Estimulador de próstata:Reconocible por su forma curva y a menudo equipado con una rama adicional para estimular el perineo, este juguete sexual está diseñado para apuntar a la próstata con precisión, ofreciendo así sensaciones intensas y específicas.
• Arneses:Compuestos por dos partes, los arneses permiten una experiencia compartida. La parte corta se inserta en la vagina de quien la porta, mientras que la rama más larga permite la penetración de la otra persona. Esta configuración ofrece una sensación de transmisión de movimiento, ideal para travesuras intensas y en compañía.
  
  

Ya sea solo o en pareja, el uso de lubricante es esencial para garantizar una experiencia anal segura y placentera. Como el ano no produce una lubricación natural, es necesario un lubricante adecuado para facilitar la penetración y proteger las mucosas durante toda la estimulación. La exploración anal puede ser fuente de placer y complicidad, pero es importante tomarse el tiempo para familiarizarse con su cuerpo y sus deseos, priorizando siempre la comodidad y la seguridad.